La libertad de la fantasía no es ninguna huida a la irrealidad, es creación y osadía.

IONESCO.

La mujeres hacen la HIS TO RIA. (Parte I)

SARA
ELLA
ARETHA
BONNIE
PATTI
NICO
NANCY
JOAN
JANIS
GRACE
CHERIE
DEBBIE



Se escuchan sugerencias, somos amplios muy. Vamos del punk rock (PANRRÓ) al Jazz y no se como pero a todas las queremos un montonazo.

La Mome.

EDITH. Estoy segura de que podría leer a Baudelaire en un cabaret y aplaudirían. PIAF

Galeano, tipazo.

Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los medios de producción y de cambio, no expropian las cuevas de Alí Babá. Pero quizá desencadenen la alegría de hacer, y la traduzcan en actos. Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea un poquito, es la única manera de probar que la realidad es transformable.

Diario de una prostituta. Parte V FINAL.

DIA 30 AGOSTO, 1962.
Haciendo un flashback, un racconto, podemos decir que progresamos mucho desde ese día de 1949, hasta hoy donde trabajamos re felices con este hombre que no es valiente por una I. Estamos viviendo bien, apretadas, pero cómodas; nos prestamos las pelucas, las extensiones, las medias de red que nunca faltan, el rimel ese nuevo para el que hicimos la vaquita porque salía como $500, compramos un equipo de música di-vi-no donde escuchamos el CD de Amy, hacemos fiestas re divertidas, ya no nos alimentamos a base del sushi que el chino (del cual me separe, pero del que sigo siendo muy amiga) preparaba, en el trabajo nos ascendieron, y ahora hacemos un par de numeritos en el escenario los viernes y los sábados, nos viene a ver mucha gente, mucha mujer grande, mucha vieja con chongo, muchos adolescentes al pedo. Yo te digo, con este plantel nos vamo’ para arriba muy pronto, y quien te dice terminamos como Zulma en Los Profesionales, repartiendo cartas documento y cantando temas re copados… yo por las dudas cruzo los dedos.

Diario de una prostituta. Parte IV Más gente nueva de la misma calaña.

DIA 15 DE JUNIO, 1962.
Me pelee con el chino mugriento ese, porque no sabía hacer mates y tenia el olor a pescado impregnado en la piel, además de que toca la guitarra con una piba que toca como la puta madre, y se están organizando para armar algo, así que mucho no lo estaba viendo, ya no aparece por el barrio chino, ni va a cazar palomas a Plaza de Mayo. Fue.

DIA 17 DE JUNIO, 1962.
Ahora con este sueldito me alcanza para los cigarros, la comida, hasta ya no tenemos que andar colgadas de la luz y me compre el CD de Amy Winhouse. La petiza se compro las medibachas esas de color violeta fluo que habíamos visto esa vez en Once como tanto quería, la pelirroja pudo comprarse al fin, tintura de marca, las peruanas pudieron pagarse documentos truchos de alta calidad y ahora se llaman: Emilia Ceccet, Gabriela Ledo, Mariana Fossatti y Juliana Simoes Risso, todas argentinas de nacimiento…

DIA 23 AGOSTO, 1962.
Hoy la petiza y yo habíamos ido a comprar corpiños a La Salada, cuando volvimos vimos al chino, que entraba a nuestro edificio, acompañado de dos travestis feas como la mierda, así que ahora sumada a las 4 argentinas, la petiza, la pelirroja, Julia y yo, tenemos a Juliana y a Gabriela las ‘Traviesas del cono sur’ durmiendo en el sofá-cama, y como ya hay una Juliana y una Gabriela, desde antes en esta casa, les decimos Lautara y Becku, respectivamente, para no confundirnos.

Diario de una prostituta. Parte III Revoluciones.

DIA 26 DE MAYO, 1962.
A mi de buena me toman por pelotuda… estas dos pibas se tomaron a pecho lo quedarse en casa, así que ahora también viven conmigo y con Juli en el monoambiente, y a veces traen un par de ilegales peruanas, que cocinan ceviche para todas, para que no salgamos a trabajar con el estomago vacío, PANZA LLENA, CORAZON CONTENTO, dicen algunos.





DIA 28 DE MAYO, 1962-
José acepto lo de mi profesión, a tal punto que ahora me consiguió laburo no solo a mi, sino a Julia, a la petiza, a la pelirroja sucia y a las peruanas, en un cabarulo en la calle Larrea, donde el también empieza el lunes a trabajar de mozo en patines/stripper.

DIA 10 DE JUNIO, 1962.
Clientela conocida, el ambiente familiar, hoy hicimos 2x1 a un tipo con su hijo, y festejamos el cumpleaños de 15 de unos septillizos; cuatro hombres y tres mujeres. Así que no dábamos abasto, la petiza tomo el turno de los septillizos, porque dice que le gusta trabajar con niños.

Diario de una prostituta. Parte II Amor Étnico.

DIA 11 DE ABRIL, 1962
Ayer acompañe a Julia, como fue prometido, a comprar esas porquerías sin gusto que come ella. Y cuestión, que me enamore, me enamore de un proveedor de salmón ahumado, un chino pobre y venido a menos, que migro a la Argentina, en busca de nuevos horizontes. Nombre de pila: José Pablo, pero me dicen CHINO- me dijo. Creativo el tipo, a la hora de los sobrenombres.

DIA 14 ABRIL 1962-
Ayer entre idas y venidas, junte unos $100.- y monedas, que le preste al chino para el Bondi, porque esa misma noche, cuando termine mi ronda, le pegue un tubazo y se vino a charlar conmigo de berberechos, salmones, atunes y de algunos bagres que me comí yo, alguna vez…

DIA 21 DE MAYO, 1962.
Llegaron dos nuevas que me quisieron soplar la cuadra. Una pelirroja, toda sucia, que se ve que mucho de este mundo no sabia, se manejaba como el culo, la otra una petiza de sonrisa grande que se hace llamar Agus la gatita, que villera, por dios. La pelirroja parecía la Sirenita con ese pelo y la otra sacada del Moyano hace menos de tres días.

DIA 25 DE MAYO, 1962.
Querido diario, como no hubo más remedio, a la petiza y a la pelirroja sucia les enseñe un par de estrategias y hasta las invite a tomar mates, que es lo único que me quedaba, además del tofu, que Julia al final no comió. Tienen más hambre que Zulma Lobato y más problemas que los Pérez García, pero son dos buenas minas (sobre todo la petiza)

Diario de una prostituta. Parte I Ser puta, TOMO 1.

DIA 10 DE MARZO, 1949.
Ser una trabajadora sexual es más que dar para recibir. Descubrí que es más complejo que eso. La puta como llueve en esta esquina.

DIA 30 JUNIO, 1953.
Como dijo alguna vez una vieja conocida: Puta una vez, puta para siempre. La pollera que me puse hoy me quedaba re hot.

DIA 5 ABRIL, 1962.
Julia, mi hermana, descubrió que soy puta. Si, cual hay, le dije. Entendió, perfectamente…por suerte. La semana que viene voy a acompañarla al barrio de la comunidad oriental porque no consiguió tofu fresco en Coto.

Los comienzos de La Cofradía.

Indudablemente el tiempo pasó.

Ya no somos desconocidos de chomba y pantalones de operario y ojotas y perlas.

Todo eso lo perdimos, los encuentros a las once de la mañana, cuando te quedabas dormido y los colectivos pasaban con tan poca frecuencia. Perdimos todo che. Y no nos importó. Perdimos las manos transpiradas, los cafés, perdimos los cds de Ella Fitzgerald, perdimos las boinas y las terrazas. Perdimos la inocencia, las ganas de gritar a los cuatro vientos lo felices que éramos, perdemos las esencias muchas veces y la paciencia. Y ahora que queremos, ya no tenemos donde gritar.

Perdimos un par de cervezas en los sillones del bar, perdimos años pensando. Los saludos se fueron, se fueron las gentes, las valijas y los inmigrantes.

Y no se dónde habrá quedado la intensidad, no se. Que triste, que ganas de llorar ríos, que ganas de sacarte fotos, que ganas de que te rías de mi y de que me retes tanto.

Volvería la violencia, volverían Santiago y Clara y Julia.

Y las mañanas de sábado con un cigarro en la boca, en un banco de plaza, significarían algo más.

Significarían patas que mover, angustias, polleras y tiradores. Taxis hechos a mano.

Cuchillos, gentes que se siguen yendo.

Significaría volver a ser desconocidos y no perder más nada, porque ya nos despojamos de todo.

Perdimos las almas, perdimos los años más jóvenes, perdimos los cortes de pelo.

A mi se me olvidaron mil tipas que creé, por ahí. Se perdieron mil imágenes, mil máquinas. Se nos desinflaron las caras, los cuerpos, las caras, los cuerpos, los ojos, se nos fueron ellos.

Y los guantes rojos, y los valses tristes y las películas francesas, y las caras de asombro que pusimos cuando Paula dijo que no había visto Tiempos Modernos y nosotros que reíamos por no llorar y decíamos pobrecita. Porque siempre lo dijimos.

Y de repente un cigarro es un chirlo en el culo, y de repente fallamos y fallamos y estamos tan tristes si nos damos cuenta.

Y no se por qué, pero nos aferramos a Rayuela, supongo porque era nuestra única esperanza de sentirnos mejor al mirarnos a la cara y buscar explicaciones y decirte Horacio, siempre buscando sentirnos mejor.

Ni nos miramos después.

Y tus uñas pintadas de rojo, y las mías eran rojas también.

Y las monerías me aburren, te lo juro. Y yo no quiero una mamá porque ya tengo.

Yo quiero un otoño y después otro otoño y otro.

Yo quiero hojas.

Quiero ser una inmigrante tan pobre y por eso comer carbón, quiero servir una mesa, quiero todas mis bufandas, quiero estar triste pero decirles a todos que soy la más feliz de ésta fiesta.

Quiero ser fideos, plantas, vientos y monstruos.

Quiero ser una muñeca y que me duela la sonrisa, me duelan los cachetes y los ojos me lloren de no parpadear. Quiero ponernos perfume.

Que el avión se caiga otra vez por favor.

Que el tren choque.

Que las golondrinas no se vallan nunca más.

Quiero volver. Encontrar la energía, encontrar a todas las tipas, a los tipos, encontrar a María. Mirar al horizonte e imaginar todo lo que querías.

Necesito espacio, necesito un aplauso para saltar, necesito otros dos para frenar, necesito una patada contra el piso para ir más rápido, necesito contar pasos para atrás, y para adelante.

Se nos fueron los conflictos, se nos fueron los hermanos, se nos fueron los abrazos que nos dimos, porque aunque pocos nos los dimos.

Necesito decir, a cada rato.

Y siempre se trata de lo que queremos, de lo que necesitamos, de lo que perdimos, de lo que olvidamos, de lo que no vamos a ser nunca más.

Y yo se que así nos gusta más, porque el drama nos sienta mejor a nosotros viejo. Somos demasiado fanáticos de Edith Piaf, para la comedia.

Y te nombraban Horacio porque tenías un pulóver verde, y siempre buscaste algo.

Pero siempre fuiste Lucía y que ciego, que ciego éste Horacio, que te quiere tanto.



BTE & Cofradía.




Integrantes de La Cofradía, en el Café Concert del Banfield Teatro Ensamble.